domingo, 13 de septiembre de 2009

Qoya Killa Raymi

¡¡¡Jallalla Pachamama!!!


Al Andar con algunas Comunidades Indígenas hemos ido aprendiendo a resignificar el sentido de la Vida, desde todas sus formas. Hemos ido aprendiendo a resignificar la relación que mantenemos con la Madre Naturaleza. Una relación no sólo de respeto, también de agradecimiento con ella.


En ese Camino, nos hemos encontrado con otros conocimientos y sabidurías más arraigadas a las raíces ancestrales de nuestr@s antepasados, que nos enseñan distintas maneras de reconocer que todo el tiempo estamos aprendiendo pero, al mismo tiempo, estamos aportando.


En esos Andares, hemos aprendido que Septiembre es el mes de la siembra. Es el momento de consentir a la Mama Pacha –Madre Tierra- a través de ceremoniales, rituales y celebraciones a los Espíritus de la Naturaleza; al viento, la lluvia, el Padre Sol, la Madre Luna, el Cóndor, el Colibrí… que expresen el agradecimiento por darnos la vida y mantenernos vivos.


Es así como el Pueblo Nasa del Norte del Cauca, hace apenas unos días celebró el Ritual del Despertar de las Semillas: “Saakhelu” y como la Nación Yanakuna se prepara para festejar, en próximos días, el “Qoya Killa Raymi”: La Fiesta de la Mujer y la Luna; un momento dedicado a la Luna, a la Madre Tierra, a la Koka, al Agua, al Maíz, a la Qoya –mujer-. Siempre en dualidad, complementariedad y reciprocidad.


De esta manera, vamos caminando y construyendo historia. Vamos juntando nuestros pasos, alegrías, sueños y esperanzas. Vamos compartiendo palabras, procesos, sentires, pensares y haceres.